Vinoterapia, por dentro y por fuera
Dentro de los conceptos de vida sana muchas veces encontramos menciones a las bondades del consumo moderado del vino (sobre todo el tinto).
Ahora, incluso, se da un paso adelante con los llamados vinos ecológicos.
Este criterio impulsado el llamado enoturismo, practicado por los amantes del caldo de uvas.
Más recientemente como parte del auge de los tratamientos de belleza y relajación con productos naturales la industria de los viajes también rescató una vieja práctica, la vinoterapia.
Se trata de un concepto que, pese a su antigüedad, para la década de los 90 del siglo XX se había vuelto desconocida.
En la historia de esta modalidad de búsqueda de bienestar están las referencias del uso en la antigüedad de mascarillas faciales con uvas amasadas para combatir el envejecimiento de la piel.
Vinoterapia y baños
Hoy aceites obtenidos de la semilla y el hollejo de la uva son parte esencial del arsenal de belleza de las instalaciones para el cuidado y recuperación de la piel.
Los expertos aseguran que los taninos, hallados básicamente en las uva negras, previenen el envejecimiento de la piel. También ayuda a la renovación de sus células.
Otro de los componentes que aportan las uvas negras (aunque también el chocolate y los arándanos) es el reverastrol. Este es un tipo de fenol natural producido por las plantas para protegerse de bacterias, hongos y lesiones.
En algunos de los establecimientos el concepto va más allá y los masajes y hasta baños en vino por fuera se completan con el bienestar interno de beber una copa del caldo. Eso sí, con moderación, que UNA copa (o dos) es la cantidad diaria recomendada para obtener resultados saludables.
En el centro de este renacimiento de la vinoterapia se encuentra Les Sources des Caudalies en Burdeos, Francia. Allí en 1999 los cosmetólogos Mathilde Cathiard y Beltrand Thomas abrieron su spa de vinoterapia.
La instalación está ubicada en el corazón de los viñedos de Chateu Smith Haut Lafitte, donde todavía funciona.
Vinoterapia con ejercicios físicos
El tratamiento en la actualidad forma parte de un complejo que incluye un hotel de 5 estrellas y el restaurante de 2 estrellas La Grand’Vigne. También la posada rural La Table du Lavoir, la tienda de comestibles gourmet RED, y el bar Paradox francés.
Otras opciones son los ejercicios físicos con entrenador para la construcción muscular, jugar tenis y montar en bicicleta o caminar por los viñedos de la región y sus castillos.
La búsqueda del bienestar anti estrés abarca clases de cocina y un recorrido tras bastidores por el Chateau Smith Haut Lafitte para conocer sus métodos de cosecha, elaboración y embotellado.
Pero hoy, tras el éxito de los franceses, se pueden hallar centros especializados o que brindan la vinoterapia entre sus servicios en varios países, entre ellos Estados Unidos, México, España, Italia y hasta Taiwan…
El primer spa de vino en España se abrió en el Wine Spa del Hotel Golf Perelada, ubicado también en una zona de tradición vitivinícola.
En todas la regiones
A sus tratamientos faciales y corporales que utilizan derivados de la uva le denominan Ampeloterapia. Esta abarca productos extraídos de uva roja, fangos de vino, levaduras, aceite de semilla de uva, vino tinto o moscatel y otros componentes naturales.
Muchos de estos productos se pueden adquirir también en este establecimiento que posee, además sauna, baño turco, jacuzzi y piscina al aire libre.
Para viajeros interesados en tratamientos similares en otras regiones del mundo aquí podrá algunos vínculos:
Marquis Reforma México, que ofrece baños con uva Tempranillo y Aire Ancient Baths en Nueva York, España (Barcelona, Sevilla), Chicago, París y Londres, cuyos baños utilizan la uva tinta española de la Ribera del Duero.
En Brasil también ofrece un vino-spa (Spas do vinho e vinoterapia) el Hotel & Spa do Vinho en Bento Gonzalves, Brasil, cuya foto encabeza esta nota, gracias a Nahália Segato (Pixabay)